Stiller negó que haya maltratado a la prensa mexicana que hace unas semanas lo visitaron como parte de la promoción de Una noche en el museo 2, días después de la alerta sanitaria de influenza en México.
El Universal reportó que el actor se lavaba las manos luego de saludarlos de mano y que contestaba de modo seco a las preguntas.
"Fue un malentendido involuntario, no quiero de ninguna manera transmitir un mensaje negativo de México, un país que quiero mucho. Su gobierno manejó la situación de manera maravillosa", indicó a pregunta expresa, en conferencia de prensa realizada hace unos minutos en un hotel de la Ciudad de México.
Recordó que su primera película, que espera no haya visto nadie por lo mala que era, la rodó en Ixtapa Zihuatanejo.
"Mis amigos mexicanos tienen un gran sentido del humor. Yo estoy fascinado siempre que estoy aquí", puntualizó.
El debate.
¿Que paso pues?
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