
El financiamiento de Warren Buffett, la influencia de Barack Obama y la asociación de un astuto ex dirigente soviético podrían tornar las estepas de Asia central en un lugar de almacenamiento de uranio ''seguro''.
La idea, que comenzaría a desarrollarse con un fondo de 150 millones de dólares provenientes de una donación inicial del multimillonario estadounidense Warren Buffett, aún debe navegar las tortuosas aguas de la política atómica mundial a la par de un plan paralelo propuesto por Rusia. Pero la creación de ese tipo de bancos de energía nuclear va en ascenso como una manera de evitar que las armas atómicas caigan en las manos equivocadas.
Las decisiones podrían tomarse a principios de junio en Viena.
En un discurso histórico ante decenas de miles de personas en Praga, la capital checa, Barack Obama dio detalles sobre un plan agresivo sobre control armamentista, el cual incluía un banco internacional de combustibles, ''a fin de que los países puedan acceder a la energía atómica sin acrecentar los riesgos de una proliferación''.
Ese es el temor: las centrífugas que enriquecen el uranio con su isótopo fisionable U5 puedan llegar a fabricar uranio enriquecido fisionable para bombas atómicas.
Sólo una docena de naciones tienen plantas de enriquecimiento, pero la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) , con sede en Viena, considera que el uso de plantas atómicas se duplicará en los próximos 20 años. Cada vez más gobiernos desean tener capacidad de producción energética.
No hay comentarios:
Publicar un comentario